Con la confirmación de la DIA se revela que Estados Unidos está usando los teléfonos inteligentes para hacerse con información de sus ciudadanos, tanto dentro de su territorio como fuera de él. Tal afirmación ha puesto en el tapete la cuarta enmienda, haciendo saltar las alarmas en un tema tan delicado como el derecho a la privacidad.
Aunque parezca increíble, la Agencia de Inteligencia de Defensa (DIA) admitió que adquiere datos de ubicación a empresas dedicadas a vender información de las personas, la cual obtienen pagando a los desarrolladores de APP y sitios web.
La información se dio a conocer a través del New York Times, quien obtuvo un memorando dirigido al senador Ron Wyden por parte de la DIA. En este puede leerse -además de la confirmación de la compra de la información- lo siguiente: “su personal solo puede consultar la base de datos de ubicación de Estados unidos cuando está autorizado a través de un proceso específico”.
here's the defense intelligence agency memo confirming that the government is buying commercially available smartphone location data w/o a warrant pic.twitter.com/DXGH24PRph
— chris mills rodrigo (@chrisismills) January 22, 2021
Asimismo, indica que tal autorización debe venir de la Oficina de Supervisión y Cumplimiento y La Oficina del Asesor General.
La cuarta enmienda no está a la venta
Pocas cosas levantan más suspicacia, paranoia y hasta cierto punto molestia que la sensación de ser espiado, sobre todo en una sociedad como la estadounidense, la cual se jacta de su sistema legal. Hay un dicho que afirma que “hecha la ley, hecha la trampa”, y es que para algunos el gobierno americano ha encontrado en esta compra de información una rendija para saltarse o vulnerar la cuarta enmienda. De hecho, la DIA afirma que puede recopilar legalmente los datos, siempre que no los mire.
El senador Wyden no está muy conforme ni de acuerdo con esto, de hecho, el lidera un proyecto de ley titulado “La Cuarta Enmienda no está a la venta”; el mismo persigue la prohibición de la compra de información que solo se podría adquirir mediante una orden judicial. De manera sucinta, la Cuarta Enmienda requiere que las agencias gubernamentales dispongan de una orden judicial antes de obtener datos de un tercero.
El no invocar el poder de la ley al momento de comprar los datos es la excusa que expone la DIA para validar sus acciones.
Por su parte, la Unión Estadounidense de Libertades Civiles a través de su abogada Ashley Gorski señala en unas declaraciones dadas a The Verge , lo siguiente: “el gobierno no puede simplemente comprar nuestros datos privados para eludir las protecciones constitucionales fundamentales”.
También cabe acotar que para muchos esta noticia no vendrá como una novedad, como sabrán, el mítico Edward Snowden fue el primero en denunciar públicamente estas verdades. No obstante, el escucharlo de la boca de los responsables es algo cuanto menos inquietante.
Vía | The New York Times