Una base de datos abierta ha revelado las identidades de más de 200,000 personas que parecen estar involucradas en un esquema de reseñas falsas en Amazon. Este hallazgo fue hecho por el equipo de ciberseguridad SafetyDetectives, quienes descubrieron el modus operandi de una red que se dedica a proveer reseñas positivas a vendedores de Amazon.
A principios de mayo, los investigadores de Safety Detectives encontraron un servidor público en línea, el cual contenía 7GB de datos y más de 13 millones de registros que parecían estar vinculados a una operación ilícita entre vendedores de Amazon y clientes dispuestos a proporcionar valoraciones positivas en sus productos.
Puede que a simple vista no haya mucho qué pensar sobre empresas proporcionando productos de manera gratuita a influencers, bloggers o usuarios en general a cambio de un feedback positivo. No obstante, para Amazon esto supone un problema. Actualmente hay una batalla legal entre el gigante del comercio electrónico y vendedores poco éticos, cuyas reseñas deshonestas ponen en riesgo la credibilidad de la plataforma y perjudican a la competencia.
Así es cómo funciona el negocio de las reseñas falsas en Amazon
La información encontrada en la base de datos revela lo suficiente del procedimiento, y tampoco hay que ser un genio para conjeturar cómo funciona el resto. Básicamente, los vendedores de Amazon deseosos de aumentar sus valoraciones positivas envían a los revisores una lista de artículos en los cuales les gustaría obtener un review de 5 estrellas.
Los usuarios que harán el review adquieren el producto a través de Amazon de manera que figuren como compras verificadas. Unos pocos días después de recibir el producto, los usuarios dejan una valoración 5 estrellas.
Posteriormente, el proveedor del review falso enviará un mensaje al vendedor, el cual contiene un enlace a su perfil de Amazon, junto con los detalles de PayPal. Una vez que se corroboren los datos y se completen todas las reseñas, el vendedor de Amazon enviará un reembolso vía PayPal al autor de la misma, quien se queda con el producto a manera de pago.
Dado que PayPal actúa como el medio para las transacciones, no hay manera de que Amazon pueda determinar lo que está sucediendo tras bastidores.
No se sabe quién es el propietario del servidor y la base de datos. Sin embargo, hay indicios de que la organización responsable tiene sede en China debido a los mensajes escritos en chino que se filtraron durante el incidente.
Y para dejarlo bien claro, toda esta operación viola los términos y condiciones de la comunidad de Amazon, así como también varias leyes de protección al consumidor. Por lo tanto, los responsables (tanto vendedores como autores de reviews) podrían enfrentar sanciones legales.
Vía | Safety Detectives
