La policía italiana ha doblado sus esfuerzos para contrarrestar la piratería de contenidos por Internet, específicamente con todo lo relacionado a IPTV (Televisión por Protocolo de Internet). Para ello las autoridades italianas han empezado a monitorear el tráfico de prácticamente todos los proveedores de servicio de Internet nacionales, rastreando a los usuarios que han accedido a streams ilegales.
La operación iniciada en mayo de este año por la Guardia di Finanza responde al nombre clave Dottor Pezzotto; y como podrán imaginar, su objetivo no es otro que combatir la piratería de medios audiovisuales amparados por derechos de autor. A diferencia de otras operaciones y campañas, esta vez los blancos no solamente los proveedores u operadores de servicios de IPTV piratas, sino también los usuarios que usan dichos servicios.
Entrando en detalles, la operación fue orquestada en torno a más de 500 recursos piratas de IPTV, incluidos sitios web y canales de Telegram. En este momento, la policía también informó que más de 310 piezas de infraestructura de IPTV, incluidos servidores primarios que distribuyen transmisiones ilegales, fueron sacados de línea.
La guerra de Italia contra los piratas de IPTV se intensifica
En este sentido, la Guardia di Finanza ha llevado la guerra a las calles, por lo que esta vez le tocará pagar también al ciudadano común. Gracias a un novedoso sistema de rastreo, se ha identificado a miles de usuarios culpables de consumir contenido pirateado.
Según el reporte, las autoridades italianas pudieron rastrear a los usuarios de servicios de IPTVs pirata al «organizar la redirección de las conexiones nacionales de todos los proveedores de servicios de Internet». De esta manera, los incautos clientes realizaban la petición en un servidor controlado por el policía configurado para registrar su actividad.
Como consecuencia, los usuarios identificados deberán pagar multas que van desde los 154 euros hasta los 1.032 euros en caso de reincidencia. Con eso dicho, ya se están despachando las cartas que notifican a los usuarios de la infracción cometida. Para el momento de publicar este artículo, la primera oleada de cartas ha alcanzado a más de 1.600 individuos identificados.
Sobra decir que esto siembra un precedente un tanto preocupante en Europa; no por el fin de la operación, sino por los medios empleados, los cuales son propios de persecuciones al terrorismo y otras actividades ilegales en la red de mayor prioridad.
Vía | TorrentFreak
